Podíamos empezar definiendo lo que es un vestuario en
términos deportivos. Bien, el vestuario es el local situado dentro de unas
instalaciones deportivas destinado para el cambio de ropa de un equipo,
normalmente está dotado de bancos, percheros y una serie de hileras de duchas
comunes.
No sé como explicarle al señor de la RAE (Real Academia
Española) lo equivocado que está. Un vestuario es algo más que un local, porque
aunque no os lo creáis un vestuario tiene jerarquía, allí existen sitios
asignados aunque no aparezcan los nombres de nadie en ningún lado, allí se
cuecen batallas y se lavan los trapos sucios de un equipo.
Esa sensación al entrar el primer día te marca de alguna
manera, es una mezcla de nervios, inseguridad y ganas de vivirlo. Se comparten
momentazos!! En ese frio local que llaman vestuario se siente el silencio en el
momento de calzar las botas y levantas la cabeza y ves a un compañero poniendo
cremas, otro atándose de una manera un tanto maniática, el de tu izquierda se
pone las espinilleras al revés a propósito y te sientes privilegiado por
compartir 20 metros cuadrados con gente tan diferente a ti pero que comparte tu
gusto por el fútbol.
Es un sitio que si pudiera hablar contaría las broncas más
grandes jamás imaginadas y las risas más sinceras que puedas pensar. No existen
dos iguales, es imposible, por muy ruin que pueda parecer estéticamente, para
alguien que viva varias temporadas allí eso es su templo es el lugar donde se
conjura un equipo antes de salir al campo, donde crecen los grupos porque todos
reman en el mismo sentido.
Ahora que tenemos una versión diferente del término
vestuario, podíamos preguntarle a un entrenador que es para él, llevar un
vestuario, porque no estamos hablando que vaya a cogerlo en peso y se lo lleve
a otro lado, estamos hablando de administrar 20 o 25 caracteres forjados cada
uno en su casa por su madre y por su padre. Existe una habilidad que tampoco
reconoce la RAE que es la mano izquierda, y es la que utiliza el “mister” para
calmar ánimos y para motivar a su gente.
