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| Fran Casteleiro, "Caste" |
El puesto de 9, del que debe anotar
si o si, del que todos esperan que resuelva donde a otros les quema el balón,
ese jugador por el que todos suspiran y por el que algunos pierden y empeñan
hasta los calzoncillos. Ese que el Maniños lleva buscando durante veinte
jornadas, se le ha aparecido este domingo en forma de partidazo de Fran
Casteleiro “Caste”.
Llegaba el San Tirso segundo en la
tabla y el míster del equipo sacaba la solución de su chistera y colocaba al
eterno capitán como hombre de referencia en la punta del ataque. Las ausencias
de Luis Blanco y Juan Jesús llevaron al técnico ferrolano a remover los
cimientos del equipo para jugar sus cartas y apostar fuerte ante un rival con
claro cartel de favorito para imponerse a un Maniños que parecía no encontrar
el norte ni con la brújula trucada.
Luis Blanco y el veterano Fernando
“Penano” eran las opciones al inicio de temporada. El segundo fue un fijo en el
puesto durante las primeras jornadas, su poca fortuna y los malos resultados lo
relegaban al banquillo mientras Blanco abandonaba el equipo un tiempo. Zapa o
Churras ocuparon esa posición circunstancialmente en alguna jornada y se fichó a
Rubén como 9 grande de referencia que a pesar de su buena disposición y
voluntad poco podía aportar al ataque blanco.
La vuelta de un Luisito ya
enchufado se hizo notar con sus goles y fue precisamente su ausencia por
sanción lo que nos llevó este domingo a descubrir a ese 9 que Caste llevaba
dentro y que sin duda salió a relucir cuando el equipo más lo necesitaba. Al
más puro estilo de un 9 clásico, se gano la parcela del ataque, mantuvo más que
ocupados a los centrales rivales, lo que aprovechaban Zapa y Pelé para crear
ocasiones que dieron al equipo más mordiente y llegada. Controló y repartió de
espaldas y generó fútbol tanto así que cedió a Pele un balón franco en boca de
gol para el primer tanto del Maniños, además de contar con protagonismo en
prácticamente todas las ofensivas del equipo. Todavía le quedarían arrestos al
9 para entrada la segunda mitad aportar calma, contundencia y dirección desde
el medio centro cuando Mourón decidía dar entrada a un Penano que oxigenó y
mucho a su equipo desde la punta del ataque en los minutos finales.
Todo un partidazo el de este nuevo
nueve que se apareció como rayo de luz en medio de las tinieblas de O Pote.
Para un roto y para un descosido, central, lateral, medio centro y ahora… un 9
de los de verdad. Próximo partido volveremos a verle sobre el césped y me da
que no será de 9, o si….? Se admiten apuestas.
*Nota del autor:
Ganar al San Tirso no es
casualidad, para esto todos han tenido que estar a un nivel muy alto de juego y
concentración durante los 90 minutos y hoy todos y digo todos lo han
conseguido.
SI SE PUEDE!!! GO MANIÑOS!!!
