Mesa en su despedida en Rioseco |
Con las misma ganas y con la misma fuerza y después de liderar la AFACO durante unos años llegó a la Delegación y ahí nos hizo entender que los rivales sólo lo son lo que duran los 90 minutos de partido y que se puede hablar e incluso ir a tomar una caña o un café con los directivos y demás componentes de los otros Clubs sin que pase absolutamente nada sino todo lo contrario. Nos hizo ver la importancia de estar unidos por encima de los colores. Nos guió y apoyó en los momentos difíciles, que los hubo, que nadie lo dude. Supo rodearse de gente de su confianza, que no le iba a fallar pero que además tenían todos algo en común no había en ninguno de ellos intereses más allá de lo deportivo. En definitiva hizo una "piña" con todos nosotros gente de fútbol y que compartíamos hobbys y preocupaciones comunes.
Algunos (muy pocos) creían que sólo defendía a los Clubs pero el siempre defendió la justicia y si tenía que llamar la atención a cualquiera fuera directivo o quien fuera lo haría sin ningún rubor pero por encima de todos nunca se escondió y siempre fue de frente y siempre tuvo la Delegación (y su teléfono) abierto para todo el mundo.
Se acabó una gran etapa en el fútbol ferrolano (esperemos que ahora se abra otra gran etapa con el nuevo delegado) pero el legado de Manolo Mesa perdurará en el tiempo y los que estuvieron y estuvimos cerca de el lo recordarán siempre como el hombre que dio el puñetazo en la mesa para revindicar nuestro fútbol, el fútbol de Ferrolterra.
La gran ovación que recibió ayer de todo el fútbol y del fútbol sala sólo indica el nivel de agradecimiento y respeto a un gran delegado y a un gran hombre.
Seguiremos atentamente su próximo reto que seguro que no pasará desapercibido pues una persona que fue jugador, entrenador, directivo, delegado federativo, etc tiene tan interiorizado el fútbol que es imposible no estar a la altura de los que se le requiera.
A mayores podemos sacar pecho y decir que tenemos la suerte de que encima Manolo es un buen amigo de nuestra casa... y por mucho tiempo!!!
Grande Manolo!!!