En una
nueva temporada para la ilusión, las derrotas son anécdotas y forman parte de
la competición. Llegó la primera en la fase decisiva. Un mala tarde la tiene
cualquiera, hasta la Cultural Maniños.
El míster
Pablo Mesa lo sabe bien. Caranza nunca fue plaza fácil, ni en horas bajas los
del barrio de las altas torres se rinden ante la adversidad. Por esto es que la
derrota tiene mayor perdón y suma aun sin los puntos.
Seguimos
arriba y en lo más alto. El objetivo está una jornada más cerca y la próxima se
viene "el derbi". El nuevo O Pote volverá a vibrar. Esa afición nunca
falla.
Los rivales
ya no tienen excusa, el barro voló, pero nos dejó el aroma, ese que nunca se va
y que nunca te abandona. Barro, balón, sudor y recompensa por haberlo dado todo
en la victoria y también en las derrotas.
GO MANIÑOS
(POR MANEL DÍAZ)