Partido muy igualado en donde la capacidad de definición de las locales marcó las diferencias con una pegada demoledora y capaz de sacar ventaja del más mínimo error del rival. El Maniños futbolísticamente hablando, sentido de juego, organización, trabajo e intensidad está a la altura de las verdes pero ante tanta igualdad la pegada y el consiguiente acierto es la diferencia entre ganar y no ganar. Es lo que marca entre tirar al poste o meterla para dentro. Hay que seguir trabajando en la misma línea porque las distancias entre ambos equipos son muy escasas, recordar que el Racing ya perdió en O Pote la temporada pasada.
Por dos veces se adelantaron las locales en la primera parte para Moka acortar distancias en la segunda. De nuevo las verdes ampliaron distancias cuando un par de jugadas antes Rebe disparó al poste. Finalmente Carol de penalti puso el definitivo (3-2).
Ahora toca seguir igual, no bajar la guardia y tratar de aprovechar cualquier tropiezo de nuestros rivales. No va a ser fácil pero hay que estar preparados para ello.
GO MANIÑOS