Una vez más, y ya van demasiadas, los biberones jugaron muy (demasiado) justos de gente. Tan justos que no llegaron a conformar 8 jugadores e incluso un dolor de cabeza apartó a Diego del terreno de juego lo que dejó a 6 jabatos peleando y luchando hasta la extenuación ante el cuadro valexo que demostró ser uno de los mejores equipos de la categoría.
Tenemos todos que concienciarnos que hay que poner nuestro granito de arena para que situaciones como la de hoy no pueden volver a repetirse. Por el bien de la competición, de la credibilidad del Club y por encima de todo de los propios niños.
Por eso tenemos que creer más y más en este equipo que tantas satisfacciones dio, da y seguira dando!!!